A partir del sábado 2 de septiembre, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) implementará un menor beneficio fiscal para la gasolina Magna y Premium, lo que significa que los consumidores deberán pagar un mayor impuesto incorporado en el precio por litro de combustible. Sin embargo, el gobierno aumentó el apoyo fiscal para el diésel.
El estímulo fiscal para la gasolina Magna se fija en un 48.10 por ciento, lo que representa una reducción en comparación con el 49.04 por ciento de la semana anterior. Para la gasolina Premium, se otorga un estímulo fiscal del 33.09 por ciento, en contraste con el 36.04 por ciento de la semana previa. En el caso del diésel, el estímulo fiscal se incrementa al 46.63 por ciento desde el 44.64 por ciento de la semana anterior.
¿Qué es el IEPS en México?
Es el gravamen que se paga por la producción y venta o importación de gasolinas, alcoholes, cerveza y tabaco, entre otros bienes, principalmente. Igual que el IVA es un impuesto indirecto, debido a que los contribuyentes no lo pagan directamente sino que lo trasladan o cobran a sus clientes (excepto en importación) y el contribuyente sólo lo reporta al SAT.
Estos cambios en los estímulos fiscales se traducen en un aumento en la cantidad de impuesto que los conductores deben pagar por cada litro de combustible, lo cual ya está incluido en el precio final de las gasolinas:
- Gasolina Magna: Los conductores deberán pagar 3.07 pesos de impuesto por litro, mientras que Hacienda contribuirá con 2.84 pesos por litro.
- Gasolina Premium: Se aplicará un impuesto de 3.34 pesos por litro, y el gobierno aportará 1.65 pesos por litro.
- Diésel: El impuesto asciende a 3.47 pesos por litro, y el gobierno subsidiará con 3.03 pesos por litro.
En México, se cobra el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) por cada litro de gasolina adquirido. La SHCP establece semanalmente un estímulo fiscal en función del tipo de cambio, los precios internacionales de referencia y los costos logísticos para mitigar la volatilidad en los precios.