El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se ha pronunciado sobre el llamado de su partido, Morena, para demoler la casa de la representante del Frente Amplio por México, Xóchitl Gálvez, que ha sido señalada por presuntamente no contar con los permisos correspondientes.
Durante una conferencia de prensa matutina, AMLO rechazó la postura de Morena que solicitaba la demolición de la residencia de Xóchitl Gálvez, quien también es senadora del PAN y está ubicada en la alcaldía Miguel Hidalgo de la Ciudad de México.
El presidente consideró que es esencial que los diferentes polos políticos se vean como adversarios y no como enemigos a destruir. Hizo hincapié en la importancia de evitar medidas drásticas como la demolición de propiedades y promovió la idea de un diálogo y una convivencia política más armoniosa.
AMLO mencionó que él mismo fue objeto de ataques similares cuando era opositor y fue señalado como un “peligro para México”. Enfatizó que, en su opinión, hay armonía en la mayoría del pueblo y mencionó su reciente experiencia en China, Nuevo León, donde fue recibido con entusiasmo por un grupo de niños.
Si bien reconoció que en la clase política existe confrontación, destacó que esto es inherente a la democracia y no debe causar alarma. AMLO insistió en que la polarización es menos pronunciada en la sociedad en general en comparación con el ambiente político.